No me dijo nada
David estudiaba computación en el turno de la tarde una escuela, ya llevaba 2 años de una carrera de 4 años y medio. Tenía su grupo de amigos con los que convivía entre clases y algunos fines de semana en que se reunían.En una ocasión, mientras David, mientras hacía una tarea en el centro de cómputo de la escuela, observó a una joven del turno de la mañana que se encontraba haciendo lo mismo, su nombre era Erika. David se enamoró a primera vista, no podía creer que existiera alguien con tanta belleza. Cada vez que Erika aparecía en la escuela por la tarde, David dejaba escapar un suspiro, y la llamaba como el decidió llamarla, “mi terroncito”. Sus amigos le avisaban cuando ella estaba cerca para que pudiera verla y lo alentaban a que se presentara con ella e iniciara alguna conversación. Pero David decidió amarla en silencio, ya que según él, tenía la mala suerte que cuando le hablaba a alguna chica, el día siguiente ya tenía novio. No quería que eso pasara con su “terroncito”.
Tiempo después David se encontraba en el centro de cómputo programando en el lenguaje “C++” y tenía un problema que no podía resolver. David no se había percatado que era observado, ni que alguien estaba a su espalda, solo escuchó una dulce voz que le dijo “ponle un break”. David no podía creerlo, su terroncito le había ayudado con el problema en su programa, hasta se le pasó darle las gracias. Todo el día tuvo una sonrisa dibujada en su rostro, y repetía “ponle un break”. Sus amigos no podían creer que David desaprovechara esa oportunidad para poder establecer una amistad con su “terroncito”.
El tiempo pasó, Erika tenía novio y al grupo de amigos de David llegó una joven que era amiga de Erika, se enteró del amor de David por Erika y en una oportunidad que tuvo, pregunto a Erika si ella hubiera aceptado alguna proposición de David, la respuesta fue “si, pero es que…… no me dijo nada”.
Basado en una historia real
Los nombres han sido cambiados para proteger la privacidad de los involucrados.
posted by Prometeo @ 5:40 p.m.
